SAN BUENAVENTURA
Obispo y doctor de la Iglesia
Nació
en Bañoreal, Italia. Se llamaba Juan, pero dicen que cuando era muy
pequeño enfermó gravemente y su madre lo presentó a San Francisco, el
cual acercó al niño de cuatro meses a su corazón y le dijo:
"Buenaventura" y quedó curado. Y por eso, cambió su nombre de Juan a
Buenaventura,
En agradecimiento a San Francisco, su benefactor, se hizo religioso franciscano. Estudió en la universidad de París y llegó a ser uno de los más sabios de su tiempo. Se le llamaba "doctor seráfico" porque "serafín" significa "el que arde en amor por Dios" y este santo, en sus sermones, escritos y actitudes, demostró vivir lleno de un amor inmenso hacia nuestro Señor.
San Buenaventura fue nombrado superior de los Padres Franciscanos y el Papa le concedió el título de cardenal, dicen que la noticia de su nombramiento como cardenal le llegó mientras un día estaba lavando platos en la cocina.
Practicaba la humildad, la paciencia y la meditación frecuente en la pasión y muerte de Cristo, siguiendo el consejo del Maestro: "Aprended de mi que soy manso y humilde de corazón.
En el año 1274 se celebró el Concilio de Lyon, terminado el concilio con gran éxito, todo dirigido por San Buenaventura, por orden del Sumo Pontífice, el santo sintió que le faltaban las fuerzas y el 15 de Julio del mismo año, murió santamente, asistido por el Papa en persona. Todos los obispos del concilio asistieron a sus funerales. E Papa Inocencio V predicó la homilía en el entierro del santo y dijo: "Su amabilidad era tan grande que tratarlo era quedar de amigos para siempre" y su unción al predicar y escribir eran tan admirables que, escucharlo o leer sus escritos era yá a empezar a sentir deseos de amar a Dios y conseguir la santidad.
Tomado de EWTN
En agradecimiento a San Francisco, su benefactor, se hizo religioso franciscano. Estudió en la universidad de París y llegó a ser uno de los más sabios de su tiempo. Se le llamaba "doctor seráfico" porque "serafín" significa "el que arde en amor por Dios" y este santo, en sus sermones, escritos y actitudes, demostró vivir lleno de un amor inmenso hacia nuestro Señor.
San Buenaventura fue nombrado superior de los Padres Franciscanos y el Papa le concedió el título de cardenal, dicen que la noticia de su nombramiento como cardenal le llegó mientras un día estaba lavando platos en la cocina.
Practicaba la humildad, la paciencia y la meditación frecuente en la pasión y muerte de Cristo, siguiendo el consejo del Maestro: "Aprended de mi que soy manso y humilde de corazón.
En el año 1274 se celebró el Concilio de Lyon, terminado el concilio con gran éxito, todo dirigido por San Buenaventura, por orden del Sumo Pontífice, el santo sintió que le faltaban las fuerzas y el 15 de Julio del mismo año, murió santamente, asistido por el Papa en persona. Todos los obispos del concilio asistieron a sus funerales. E Papa Inocencio V predicó la homilía en el entierro del santo y dijo: "Su amabilidad era tan grande que tratarlo era quedar de amigos para siempre" y su unción al predicar y escribir eran tan admirables que, escucharlo o leer sus escritos era yá a empezar a sentir deseos de amar a Dios y conseguir la santidad.
Tomado de EWTN
0 comentarios:
Publicar un comentario